"La desigualdad de ingresos es un problema bien reconocido. La brecha entre ricos y pobres ha crecido en las últimas décadas, pero se hizo cada vez más pronunciada tras la crisis financiera de 2008. Aunque los economistas debaten hasta qué punto la tecnología desempeña un papel en la desigualdad mundial, la mayoría coincide en que los avances tecnológicos han agravado el problema.En una entrevista concedida al MIT Tech Review, el economista Erik Brynjolfsson afirmó: "Mi lectura de los datos es que la tecnología es el principal motor de los recientes aumentos de la desigualdad. Es el factor más importante". Lo que nos lleva a preguntarnos: ¿qué ocurrirá a medida que las tecnologías de automatización e IA sean más avanzadas y capaces?".