En las naciones desarrolladas del siglo XXI, la comodidad -es decir, formas más eficientes y sencillas de realizar tareas personales- se ha convertido quizá en la fuerza más poderosa que configura nuestras vidas individuales y nuestras economías. Esto es especialmente cierto en Estados Unidos, donde, a pesar de todos los elogios a la libertad y la individualidad, a veces uno se pregunta si la comodidad es de hecho el valor supremo.…Como dijo recientemente Evan Williams, cofundador de Twitter: "La conveniencia lo decide todo". La conveniencia parece tomar nuestras decisiones por nosotros, pasando por encima de lo que nos gusta imaginar que son nuestras verdaderas preferencias. (Yo prefiero prepararme el café, pero el instantáneo de Starbucks es tan cómodo que casi nunca hago lo que "prefiero"). Lo fácil es mejor, lo fácil es mejor

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